¿Qué es un peeling?
Un peeling es un tratamiento estético que consiste en la aplicación de una sustancia química sobre la piel para eliminar las capas superficiales y estimular la regeneración celular.
Existen diferentes tipos de peeling según la profundidad y el tipo de ácido que se utilice:
- Peeling superficial: Es el más suave y se usa para tratar manchas, arrugas finas, poros dilatados, acné leve y mejorar el aspecto general de la piel.
Se aplica un ácido suave, es decir a porcentajes de concentración bajos, como el glicólico, el salicílico o el mandélico, que produce una ligera descamación y enrojecimiento.
Por lo general estas concentraciones se utilizan en productos dermocosmeticas, como cremas, geles para uso en casa.
- Peeling medio: Es más intenso y se usa para tratar arrugas moderadas, cicatrices de acné, melasma y otras alteraciones pigmentarias.
Se aplica un ácido a concentración más fuerte como el tricloroacético, glicolicolico, retinoico, que produce una mayor descamación y costras que se caen a los pocos días.
Los resultados son más visibles, se pueden requerir de varias sesiones, pero se requiere un mayor cuidado posterior y protección solar.
- Peeling profundo: Es el más agresivo y se usa para tratar arrugas profundas, cicatrices severas, queratosis actínicas y otras lesiones precancerosas.
Se aplica un ácido muy potente como el fenol, que produce una quemadura controlada de la piel que requiere anestesia y hospitalización.
Los resultados son muy buenos y notorios, pero se asocia a un mayor riesgo de complicaciones e infecciones.
Los beneficios del peeling son:

- Elimina las células muertas y mejora la textura de la piel.
- Estimula la producción de colágeno y elastina, lo que mejora la firmeza y elasticidad de la piel.
- Reduce las manchas, las arrugas, las cicatrices y otras imperfecciones cutáneas.
- Aporta luminosidad y uniformidad al tono de la piel.
- Favorece la penetración de otros productos cosméticos.
Las zonas de aplicación del peeling son:
- Rostro: Es la zona más frecuente y se puede tratar todo el rostro o zonas específicas como el contorno de ojos, los labios o las mejillas.
- Cuello y escote: Son zonas muy expuestas al sol y al envejecimiento, por lo que se pueden beneficiar de un peeling para rejuvenecer su aspecto.
- Manos: Son otra zona que delata la edad y que se puede tratar con un peeling para eliminar manchas, arrugas y sequedad.
- Espalda: Es una zona propensa al acné y a las cicatrices, por lo que se puede aplicar un peeling para limpiar los poros, reducir las marcas y mejorar la textura de la piel.
El procedimiento para aplicar un peeling es el siguiente:
- Se limpia la piel con una solución antiséptica y se desengrasa con alcohol o acetona.
- Se aplica el ácido elegido con una brocha, una gasa o un algodón, evitando el contacto con los ojos, la boca y las mucosas.
- Se deja actuar el ácido durante el tiempo indicado según el tipo de peeling, que puede variar desde unos minutos hasta una hora.
- Se neutraliza el ácido con una solución alcalina o agua fría, según el caso.
- Se aplica una crema hidratante o regeneradora con factor de protección solar.
Lo que se puede esperar después de un peeling es:
- Una sensación de ardor o picor durante la aplicación del ácido, que se alivia con ventiladores o compresas frías.
- Un enrojecimiento e inflamación de la piel durante las primeras horas o días después del peeling, que se puede tratar con antiinflamatorios o analgésicos.
- Una descamación o formación de costras en la piel durante los días siguientes al peeling, que se deben dejar caer solas sin arrancarlas ni rascarlas.
- Una mejoría progresiva del aspecto de la piel a medida que se regenera y se renueva.
La duración del peeling depende del tipo de peeling y del estado de la piel:
- El peeling superficial suele usarse desde 1 vez al mes hasta 1 o 2 veces por semana, como tratamiento en casa, para mantener los resultados.
- El peeling medio suele durar entre 6 y 12 meses, por lo que se recomienda de 8 a 10 sesiones cada 2 semanas o cada mes, según el protocolo a utilizar, se recomienda repetirlo cada 12 meses para mantener los resultados.
- El peeling profundo suele durar varios años, por lo que no se suele repetir salvo que sea necesario.
Las contraindicaciones del peeling son:
- Embarazo y lactancia: El peeling puede afectar al desarrollo del feto o al contenido de la leche materna, por lo que se debe evitar durante estas etapas.
- Infecciones o heridas en la piel: El peeling puede agravar el proceso infeccioso o dificultar la cicatrización, por lo que se debe esperar a que la piel esté sana y limpia.
- Alergia o sensibilidad al ácido utilizado: El peeling puede provocar una reacción alérgica o una irritación severa, por lo que se debe realizar una prueba de sensibilidad previa al tratamiento.
- Uso de medicamentos fotosensibilizantes: El peeling puede aumentar el riesgo de quemaduras solares o manchas en la piel, por lo que se debe suspender el uso de estos medicamentos al menos una semana antes y después del tratamiento.
- Enfermedades autoinmunes o inmunodepresión: El peeling puede alterar el sistema inmunológico o favorecer el desarrollo de infecciones, por lo que se debe consultar con el médico antes de realizarlo.